Esta vez nos vamos a la Rioja Alavesa, al municipio de Labastida para hacer una ruta que teniamos pendiente, tanto Eneko como yo, desde hace mucho tiempo: La subida al monte Toloño.
Salimos de Donostia a las 6h30 y de camino encontramos algo de lluvia y un cielo bastante encapotado. Al llegar a Vitoria estuvimos a puntito de abortar el plan e irnos de turisteo, porque ir al Toloño por primera vez y hacerlo con un nubarrón encima, como que no apetecia. Con la esperanza de que el tiempo cambiara a medida que avanzara la mañana decidimos tirar para adelante.
La idea inicial era comenzar la ruta desde el pueblo de Berganzo perteneciente al municipio de Zambrana. Al llegar a este pueblo nos encontramos con la sorpresa de que los que no son residentes no pueden entrar al pueblo en coche sin un permiso. Nos comunican que a la entrada del pueblo han habilitado un parking con barrera que cuesta 3,5€ los fines de semana. Nos acercamos al parking y resulta que tienen un sistema de mierda para poder acceder. Parece que hay que reservar previamente y hay que hacerlo descargandote una App donde hay que darse de alta para realizar el pago. El problema es que si quieres hacer insitu la gestión se ha de tener cobertura con Vodafone o Movistar. Yo que tengo Euskaltel pues no he podido hacerlo asi que al final nos hemos tenido que marchar. La razón de este parking es que desde Berganzo parte una ruta muy conocida llamada 'La ruta del agua' y ha habido muchos problemas con los vecinos por la llegada masiva de vehiculos que aparcaban por todos los lados sin control. Al final lo han regulado y se han puesto duros con el tema de las multas para aquellos que no respetan el parking habilitado asi que nosotros nos hemos marchado a Labastida porque no nos ha quedado otra.
LLegamos a Labastida y hacemos un poco de tiempo tomando un café en uno de los bares del casco histórico. Sobre las 10h00 parece que el tiempo empieza a mejorar, al menos ya no 'txispea' aunque la cima del Toloño se sigue viendo muy cubierta.
A la altura de una caseta, que es un depósito de aguas, podemos ver la granja de Remelluri. Nos dirigimos en travesía por la falda del monte hacia el Puerto de Rivas de Tereso por donde pasa la carretera LR-317 aunque no llegaremos a esta sino que un poco antes tomaremos un camino que asciende al portillo de Pagoeta/Payueta. A partir de aquí comienza lo bueno. Hasta ahora el camino ha sido un tanto monótono. En este portillo, donde encontramos una puerta metálica y una pista ancha de tierra, sale un atajo que asciende por un joven hayedo y evita dicha pista durante un buen tramo. El atajo en fuerte ascenso nos deja en una curva superior de dicha pista. Continuamos ahora por esta pista que rodea por el norte la cima de Bonbalatxi. La pista la abandonamos un poco más adelante, al llegar a un poste de señalización con la indicación 'Toloño 2,5 Km' perteneciente al PR-A 79. Ha sido coger este sendero y empezar a gozarla con el paisaje. Una maravilla de sendero que transcurre por unos parajes muy bonitos. Además la niebla iba y venía y hemos tenido momentos mágicos. Al final hemos salido a una especie de campa, y por el paraje llamado Salsipuedes, precioso por cierto, hemos llegado a un colladito: el portillo de Salsipuedes. Desde este portillo se alcanza la cima de Bonbalatxi facilmente. Nosotros hemos llegado a la cima, pero una vez en casa, nos hemos enterado que un poco mas adelante, en una cota inferior, había un buzón. Ya tenemos un motivo más para volver.
Regresamos de nuevo al portillo de Salsipuedes para continuar a través de un precioso bosque por senderos hitados, donde también hemos visto marcas de pintura roja y verde, hasta llegar a una especie de meseta que hay antes de la cima del Toloño (vértice). Tras una corta subida por un pequeño roquedo alcanzamos la cima de Toloño (vértice) donde se encuentra el vertice geodésico de primer orden. La niebla juega con nosotros yendo y viniendo pero tenemos suerte porque de vez en cuando nos deja ver. Las vistas son espectaculares. El entorno es precioso. Tal y como sospechabamos el tiempo ha ido mejorando y la niebla se ha ido disipando poco a poco. La verdadera cima del Toloño está cerca de la del vértice, a unos doscientos metros. Para llegar a ella hay que ascender por la roca por un caminillo que no ofrece ninguna dificultad. En la cima nos espera una cruz y un par de buzones más. El lugar es muy bonito. Por el norte, y bajo nuestros pies tenemos las campas o rasos de Ortada. Hacia el NE vemos el pueblo de Peñacerrada. Hacia el sur hay otra campa o meseta la cual separa la cima del Toloño de las cimas de la Peña del Castillo y Peñalasdoce. Vemos también las ruinas del Santuario de Toloño. Bajamos a esta campa y nos dirigimos hacia Peñalasdoce, la peña más lejana que vemos hacia el oeste. El paisaje con el roquedo es bestial. El acceso a esta cima es muy facil. Una vez coronada continuamos por la cresta hacia la Peña del Castillo, la cual no subiremos porque su acceso no es fácil. Un pequeño corredor herboso flanqueado por grandes rocas es el camino que tenemos hasta llegar al Santuario de Toloño donde hacemos una parada para comer. Después comenzamos el descenso hacia Labastida por el camino tradicional. Al poco de comenzar el descenso llegamos a las ruinas de la ermita del Humilladero. Aqui giramos a la derecha y seguimos descendiendo. Perdemos altura rapidamente hasta ir a parar al Parque de San Gines, donde hay un parking, mesas de picnic, barbacoas, bar. Estamos a tan solo 2Km de Labastida. Una pista flanqueada de viñedos nos acerca hasta Labastida en un paseo casi llano.
Track para GPS:
Fotos:
Comenzamos a caminar con la esperanza de que poco a poco se vaya despejando. Cruzamos la calle principal del casco historico admirando un bonito mural en una fachada.

Ascendemos a la Iglesia del Santo Cristo donde hay un buen mirador de la ciudad. En la foto la iglesia de La Asuncion y el pueblo de Labastida.

Desde la iglesia del Santo Cristo nos dirigimos al Camino del Machimbrado, donde veremos unas cuantas obras artisticas del artista Pedro Pablo Amurrio mientras lo recorremos. En la foto la obra llamada 'La Mota'. Este camino nos acercará poco a poco a la falda sur del monte Toloño entre viñedos.

El pueblo de San Vicente de la Sonsierra a lo lejos sobre un cerro.

Llegando a la falda del monte Toloño.

Bodegas Ramelluri.


A nuestra derecha, según descendemos, otra pequeña cota llamada Los Castilletes. Un bloque rocoso de unos 13 metros de altura con una pequeña cueva en su base norte.


Llegamos a las ruinas del Monasterio de Santa Maria de Toloño

Construido en el Siglo IX . Todavía se pueden ver algunos restos de lo que fue la capilla del monasterio. Aqui, en este bonito lugar, protegidos del viento, haremos una parada para almorzar.



Bodegas Ramelluri.

Nos dirigimos hacia el Puerto de Rivas de Tereso en un ascenso muy suave y un tanto largo.

Por esta zona ya escuchamos el sonido de algunos coches por lo que debemos estar cerca de la carretera y por lo tanto cerca del Puerto de Ribas de Tereso.

La zona de la cima del Peña del León, una de las cimas que tiene el Toloño, cubierta de niebla.

Un poco antes de llegar al puerto (no llegamos a la carretera) tomamos un desvío que asciende hacia el puertillo de Pagoeta.

Llegamos al portillo de Pagoeta. Aqui, en vez de seguir la pista que vemos, tiramos monte arriba hasta volver a enlazar con la pista.

A partir del portillo de Pagoeta comienza lo bueno. Hasta ahora el camino venía siendo un poco monótono. Nos adentramos en el hayedo que está espectacular.

Al enlazar de nuevo con la pista la seguimos hasta dar con el siguiente desvío que vemos indicado en la foto.

El camino resulta ser una maravilla. Se nota que hemos cambiado de vertiente; nada que ver la sur con esta vertiente norte por la que andamos ahora.



Parece que estamos alcanzando a la niebla.

El paisaje se vuelve mágico con la niebla.



LLegamos a un claro donde vemos otros caminos.

Seguimos subiendo

y nos encaramos hacia el portillo de Salsipuedes (vaya nombre, da mieditis)

Estamos maravillados. Mire por donde se mire todo es bonito. Llegamos al portillo.

Desde el portillo giramos a la izquierda y seguimos una senda que nos lleva hasta la primera cima: Bonbalatxi (1224 m). La cima está un poco escondida.

Regresamos al portillo y seguimos por una senda cerca de los cortados pero que aun no vemos.


LLegamos a un claro y comienzan los pasos entre rocas. Lo que vemos en la foto es un pequeño roquedo que tras ascederlo se alcanza el vértice de Toloño. Desde este claro parte la senda hacia la Peña del León, pero como estabamos siguiendo un track y éste no pasaba por su cima, nosotros también nos lo hemos saltado. Ya tenemos excusa para regresar en otra ocasión y subir al Toloño desde otro lugar y de paso tachar esa cima.

Enseguida damos con el vértice de Toloño.

Toloño vértice (1264 m).

Creo que esa peña es la cima de la Peña del León.

Ahora nos dirigimos a la cima del Toloño, donde están los buzones. Es la peña que se ve enfrente. Desde aquí parece inalcanzable pero todo lo contrario hay un caminillo.

Efectivamente hay un pequeño camino a través de la roca por el que se llega failmente a la cima.

Una vez arriba vemos uno de sus buzones, el buzón oriental.


Por esta zona ya escuchamos el sonido de algunos coches por lo que debemos estar cerca de la carretera y por lo tanto cerca del Puerto de Ribas de Tereso.

La zona de la cima del Peña del León, una de las cimas que tiene el Toloño, cubierta de niebla.

Un poco antes de llegar al puerto (no llegamos a la carretera) tomamos un desvío que asciende hacia el puertillo de Pagoeta.

Llegamos al portillo de Pagoeta. Aqui, en vez de seguir la pista que vemos, tiramos monte arriba hasta volver a enlazar con la pista.

A partir del portillo de Pagoeta comienza lo bueno. Hasta ahora el camino venía siendo un poco monótono. Nos adentramos en el hayedo que está espectacular.

Al enlazar de nuevo con la pista la seguimos hasta dar con el siguiente desvío que vemos indicado en la foto.

El camino resulta ser una maravilla. Se nota que hemos cambiado de vertiente; nada que ver la sur con esta vertiente norte por la que andamos ahora.



Parece que estamos alcanzando a la niebla.

El paisaje se vuelve mágico con la niebla.



LLegamos a un claro donde vemos otros caminos.

Seguimos subiendo

y nos encaramos hacia el portillo de Salsipuedes (vaya nombre, da mieditis)

Estamos maravillados. Mire por donde se mire todo es bonito. Llegamos al portillo.

Desde el portillo giramos a la izquierda y seguimos una senda que nos lleva hasta la primera cima: Bonbalatxi (1224 m). La cima está un poco escondida.

Regresamos al portillo y seguimos por una senda cerca de los cortados pero que aun no vemos.


LLegamos a un claro y comienzan los pasos entre rocas. Lo que vemos en la foto es un pequeño roquedo que tras ascederlo se alcanza el vértice de Toloño. Desde este claro parte la senda hacia la Peña del León, pero como estabamos siguiendo un track y éste no pasaba por su cima, nosotros también nos lo hemos saltado. Ya tenemos excusa para regresar en otra ocasión y subir al Toloño desde otro lugar y de paso tachar esa cima.

Enseguida damos con el vértice de Toloño.

Toloño vértice (1264 m).

Creo que esa peña es la cima de la Peña del León.

Ahora nos dirigimos a la cima del Toloño, donde están los buzones. Es la peña que se ve enfrente. Desde aquí parece inalcanzable pero todo lo contrario hay un caminillo.

Efectivamente hay un pequeño camino a través de la roca por el que se llega failmente a la cima.

Una vez arriba vemos uno de sus buzones, el buzón oriental.

Toloño (1277 m).
Vistas desde la cima de Toloño. A lo lejos vemos el pueblo de Peñacerrada.

Los rasos de Ortadar a nuestros pies.

Peñacerrada.

Penacerrada más cerca.

Descendemos de la cima del Toloño para dirigirnos a una especie de corredor herboso donde vemos las ruinas del Monasterio de Santa María de Toloño y la Peña del Castillo a su derecha.

Peña del Castillo. Esta Peña hay que escalar para llegar a su cima por lo que no la vamos a hacer.


Pasada la Peña del Castillo cogemos una senda para ir a Peñalasdoce.

Llegando a la cima.

Mirada atrás desde la Peñalasdoce con La Peña del Castillo en primer plano y el Toloño al fondo.

Peñaslasdoce (1255 m)

Los montes del Toloño que se desprenden hacia el oeste. Las vistas son una maravilla.

Nos dirigimos hacia la Peña del Castillo aunque no la subiremos.


Los rasos de Ortadar a nuestros pies.

Peñacerrada.

Penacerrada más cerca.

Descendemos de la cima del Toloño para dirigirnos a una especie de corredor herboso donde vemos las ruinas del Monasterio de Santa María de Toloño y la Peña del Castillo a su derecha.

Peña del Castillo. Esta Peña hay que escalar para llegar a su cima por lo que no la vamos a hacer.


Pasada la Peña del Castillo cogemos una senda para ir a Peñalasdoce.

Llegando a la cima.

Mirada atrás desde la Peñalasdoce con La Peña del Castillo en primer plano y el Toloño al fondo.

Peñaslasdoce (1255 m)

Los montes del Toloño que se desprenden hacia el oeste. Las vistas son una maravilla.

Nos dirigimos hacia la Peña del Castillo aunque no la subiremos.

Avanzamos entre interesantes formaciones rocosas a través de un corredor herboso.

A nuestra derecha, según descendemos, otra pequeña cota llamada Los Castilletes. Un bloque rocoso de unos 13 metros de altura con una pequeña cueva en su base norte.


Llegamos a las ruinas del Monasterio de Santa Maria de Toloño

Construido en el Siglo IX . Todavía se pueden ver algunos restos de lo que fue la capilla del monasterio. Aqui, en este bonito lugar, protegidos del viento, haremos una parada para almorzar.


Un poco más abajo de las ruinas se halla el nevero superior



La bajada a Labastida la hacemos por el camino clásico. Pasamos por la ermita del humilladero.


El monte Arbina, donde destaca su antena, y a la izquierda las Tres Hermanas; curiosa formación rocosa.

Peñalasdoce y sus cortados vistos desde el camino de bajada.

El camino clásico se dirige hacia el area de San Gines antes de llegar a Labastida.

Llegamos al area de San Gines donde hay bar, mesas de picnic...


Pasada el area de San Gines, mirando atrás vemos el Toloño donde distinguimos el perfil desde Peñalasdoce a la izquierda, el Toloño en el centro y la Peña del León a la derecha. Buen monte y muy bonito.

LLegando a Laastida, pueblo rodeado de viñas. Y es que estamos en la tierra del vino.

Entramos a Labastida por una de las puertas de la villa que servia como defensa: el Arco del Toloño, del siglo XVII

Arco del Toloño.

Bajamos al casco histórico teniendo enfrente la iglesia de La Asunción

LLegamos a la Plaza de la Paz, centro neuralgico del casco histórico.

Cuevas eremiticas bajo un pequeño tramo de la muralla que protegía a Labastida.

Y al finalizar el recorrido nos fuimos derechitos al bar a tomarnos unas cañas que veniamos sedientos.



La bajada a Labastida la hacemos por el camino clásico. Pasamos por la ermita del humilladero.


El monte Arbina, donde destaca su antena, y a la izquierda las Tres Hermanas; curiosa formación rocosa.

Peñalasdoce y sus cortados vistos desde el camino de bajada.

El camino clásico se dirige hacia el area de San Gines antes de llegar a Labastida.

Llegamos al area de San Gines donde hay bar, mesas de picnic...


Pasada el area de San Gines, mirando atrás vemos el Toloño donde distinguimos el perfil desde Peñalasdoce a la izquierda, el Toloño en el centro y la Peña del León a la derecha. Buen monte y muy bonito.

LLegando a Laastida, pueblo rodeado de viñas. Y es que estamos en la tierra del vino.

Entramos a Labastida por una de las puertas de la villa que servia como defensa: el Arco del Toloño, del siglo XVII

Arco del Toloño.

Bajamos al casco histórico teniendo enfrente la iglesia de La Asunción

LLegamos a la Plaza de la Paz, centro neuralgico del casco histórico.

Cuevas eremiticas bajo un pequeño tramo de la muralla que protegía a Labastida.

Y al finalizar el recorrido nos fuimos derechitos al bar a tomarnos unas cañas que veniamos sedientos.
Espero que os haya gustado.
Aprecio la humildad y la gratitud que transmites en tus escritos.
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