En Bizkaia, entre los valles de Aulesti por donde fluye el rio Lea y el valle de Markina por donde lo hace el río Artibai se alza el macizo de Bedartzandi con una altura que ronda los 700 m. Comenzaremos la ruta desde la localidad de Markina-Xemein y visitaremos las cimas de Zapola, Urregarai, Bedartzandi, Kobakogane y Ariztieder.
Track para GPS:
Fotos:
Desde el centro de Markina, donde hemos dejado el coche, nos dirigimos hacia la visible cantera (Kanterazarra) en la ladera E del monte Zapola.
Tras cruzar la carretera BI-633 tomamos la pista que conduce a las casas de Ugarte, Ugartetorre y Abeletxe en el barrio de Iderrraga. En la foto la casa Ugarte (izda) y Ugartetorre (dcha).
Viñedos junto al camino.
Al llegar al último baserri giraremos a la izquierda para ir subiendo hacia la cantera.
Una mirada atrás donde dejamos atrás la localidad de Markina-Xemein. A lo lejos el monte Kalamua/Max.
El camino pasa junto a la cantera. Aprovecho y me asomo por una de sus puertas. La empresa que explota la cantera se llama Olaspe y extraen el preciado 'Mármol Negro Markina' que parece ser un referente en el 'mundo de las piedras'.
El camino, desde que hemos dejado atrás los caserios, tira para arriba sin tregua. Nos encontramos un pequeño tramo algo descompuesto por que han andado con maquinaria haciendo limpia en el monte.
Desde cierta altura ya tenemosuna mejor panorámica de Markina-Xemein.
El camino por que vamos recorre la ladera E del monte Zapola a través del paraje Asaiturriaga hasta que encontramos un cruce por donde, a nuestra izquierda, subimos hacia Igotz; caserio que da nombre al vallecito que hay entre las Peñas de Urregarai y Bedartzandi.
Una vista del valle de Igotz con las Peñas de Urregarai a la izquierda sobre el caserio Larro y la cresta del Bedartzandi a la derecha. El entorno es una auténtica preciosidad.
Sobre el roquedo de Urregarai, a la derecha de la cima, vemos la ermita de Santa Eufemia donde después de visitar la cima de Zapola iremos a conocer.
Desde la pista de Igotz tomamos un atajo a traves de la campa y subimos pegados a la alambrada para enlazar con un camino superior para ir a salir junto a una pequeña edificacion de nombre Larrus.
Desde Larrus, y tras acomenter una pequeña subida, alcanzamos la borda de Kortazar; borda privada con unas vistas privilegiadas.
Al lado de la borda tenemos el portillo por el cual se accede a la senda que va hacia la cima del Zapola.
Vistas desde la cima de Zapola. Enfrente el monte Oiz.
El monte Anboto a lo lejos visto desde la cima del Zapola.
Desandamos el camino y nos dirigimos hacia el caserío Larro al que no tardamos mucho en llegar. Por delante el valle de Igotz.
Caserio Larro. El camino continua por su trasera.
Nos dirigimos ahora hacia Urregarai.
Nos dirigimos hacia un portillo,
Poco a poco vamos llegando a la base de la escalinata que sube a la ermita de Santa Eufemia, nada más y menos que 222 escalones.
Últimos metros.
Vista desde Urregarai hacia el barrio de Malats (Aulesti)
Barrio de Malats (Aulesti)
Vemos como la cima de Illuntzar, la cumbre más alta de la Sierra de Leia, sobresale detrás del Bedartzandi.
Ermita de Santa Eufemia donde se encuentra la virgen contra los dolores de cadera. LLegar hasta aquí arriba ya tiene uno ganado el cielo. La ermita y la cima de Urregarai se encuentra dentro del término de Aulesti.
Una pequeña escultura rematando el tejado en la fachada sur.
Mirar como se descojona de vosotros.
Urregarai (704 m). La cima y buzón están a unos pocos metros de la ermita. Vista de la ermita y la cima de Bedartzandi desde las Peñas de Urregarai. La verdad que el lugar es espectacular.
El monte Oiz.
Ahora toca ir bajando hasta el refugio de Atxagarai viendo el valle de Igotz.
Bajamos con cuidado para no tropezarnos y abrirnos la cabeza con tanto escalón.
Llegamos enseguida a Atxegarai, un área dotada de aterpe, mesas, sillas, barbacoas, bolera...
El aterpe por desgracia lo encontramos cerrado.
Desde Atxagarai ponemos rumbo hacia la cima de Bedartzandi. Hay varios caminillos que confluyen al final en uno y que llega a la cresta.
Abajo queda el aterpe de Atxagarai y sobre el mismo las Peñas de Urregarai que se ven impresionantes desde esta perspectiva.
LLegamos a la cresta. El camino no tiene dificultad.
Por delante nuestro un padre con sus dos hijas se dirigen hacia la cima.
Cima de Bedartzandi (700 m) y buzón. Aquí haremos una parada para almorzar antes de empreder la vuelta.
Vistas de Urregarai desde Bedartzandi.
Comenzamos el descenso. Regresamos por la cresta pero esta vez bajando por la vertiente norte. Nos dirigimos hacia esos montecitos que están en primer plano (mancha verde)
Al llegar al encinar el camino parace que se interna en la selva. Seguimos las maras de uno de los ramales del GR38 que se dirige hacia los puertos de Ondarroa y Lekeitio.
La zona es muy bonita. Este tipo de terreno a mi me encanta.
Un pequeño claro en el encinar donde un par de hayas rompen el paisaje que venimos viendo.
La senda del bosque enlaza con una ancha pista que desciende hacia Markina. El descenso desde Bedartzandi lo hemos hecho junto a esta pareja de montañeros, Blanca y Juantxo, que son de Mendaro. Simpaticos montañeros con una historia de amor relacionada con Urregarai. Hoy, en uno de sus aniversarios vuelven a revivir aquellos momentos donde empezaron a salir juntos. Nos despedimos en un cruce de caminos pues niestra intención es subir un par de cimitas más llamadas Kobakogane/Etxebistako tontorra y Ariztieder/Kobauko tontorra. Hasta luego pareja. ¡Que os vaya muy bien!.
Desde el cruce tomamos otro camino que nos acerca hasta el área de Ariztieder. Desde ahí nos acercamos primero hasta la cima de Kobakogane. El terreno es algo caotico pero sin mayores problemas. Vemos unos puntos rojos y los seguimos. Nos llevan hasta la cima donde no hay buzón no vistas. Eso si, el terreno es una preciosidad.
Eneko y su perrita Dru en la cima de Kobakogane también llamada Etxistako tontorra con 447 m.
Regresamos al area de Ariztieder.
Tras una corta y bonita subida alcanzamos la cima de Ariztieder donde si hay buzón
Ariztieder (442 m).
Regresamos de nuevo al area de Ariztieder y un aguhero nos llma la atención. Creí que era una cueva pero una vez en casa me puse a indagar y parece que son, o mejor dicho, fueron las minas de Gabaro.
Ahora si, tachadas estas dos últimas cimitas no ponemos de camino a Markina.
A esa pista que vemos abajo tenemos que ir a parar.
Una vez en la pista de asfalto enseguida llegamos a Markina.
Cruzamos el río Artebai y buscamos un lugar donde comer.
Preguntando a la gente, noa hay nada como la sabiduria popular, nos mandan a comer al Niko jatexea. Un acierto 100%.. Para ir abriendo apetito de primero una sopa de pescado.
De segundo merluza rebozada.
Eneko de primero arroz con almejas que estaba espectacular.
Y de segundo también pescado. Como no me ha hablado mientras comía doy por hecho que estaba muy bueno.
Después de comer una pequeña vuelta por Markina para ver el pueblo.
Y por último, antes de regresar a Donostia, fuimos a visitar la ermita de San Miguel de Arretxinaga pero la encontramos cerrada. Una pena.
Y esto ha sido todo. Espero que os haya gustado.