Camino de Baztan / Etapa 1 / Bayonne-Ainhoa

Camino de Baztan

Etapa 1
De Bayonne a Ainhoa

   Tenía cuatro días de vacaciones y los he aprovechado para hacer el Camino de Baztan junto con el amigo Eneko. Este camino es un ramal del Camino de Santiago Francés que une las localidades de Bayonne y Pamplona. Oficialmente son cinco etapas pero nosotros, por motivos del Covid19, lo hemos hecho en cuatro. Los albergues municipales y los de los Amigos del Camino estaban cerrados por lo que hemos tenido que ajustar la etapas buscando albergues privados y baratos. Al final, de las tres pernoctas que hemos realizado, solo la última la hemos tenido que hacer en el soportal de la iglesia de Lantz, ya que ni antes ni después, teniamos alojamiento. Bueno... haber había algo, pero a unos precios que no estabamos dispuestos pagar. Por tal motivo tuvimos que llevar la esterilla y el saco de dormir. 

   A continuación pongo unas fotos de lo que vimos en la primera etapa que transcurrió integramente por terreno francés. El paisaje, los pueblos, las casas, todo precioso y con mucho encanto. El tiempo, ¿qué os voy a contar del tiempo?. Los dos primeros días tuvimos mucha lluvia, el tercer día solo llovió medio día y el último día hizo muy bueno. A pesar de la mala previsión del tiempo tuvimos suerte, ya que llovía 5 o 10 minutos y luego nos daba tregua una media hora o más. Eso sí, la capa para la lluvia no me la pude quitar y eso siempre incordiaba un poquito. 

Track para GPS:

En Donostia, estación de Anoeta, cogemos el primer topo hacia Hendaia a las 6h18. Las estaciones de Euskotren y la de la SCNF están al lado.

En Hendaia cogemos un tren cercanias a las 7h12 que nos deja en la estación de Bayonne poco antes de las 8h00. Como era de esperar, al salir de la estación llueve ligeramente. Cerca tenemos una cafetería así que optamos por tomar un café y esperar a que deje de llover. Hemos querido venir pronto para dar una vuelta por las calles de Bayonne. Nos hemos puesto como hora tope para salir a las 10h00 por lo que tenemos tiempo. Hoy tenemos por delante una etapa de 31 Km y unos 480 metros de desnivel positivo.

Para de llover y nos encaminamos hacia el centro histórico de Bayonne. Llegamos al Pont de Saint Esprit donde nos encontramos el río Adour con bastante agua, producto imagino que de las últimas lluvias. Desde el puente divisamos las dos torres de la catedral gótica. Hacia allá nos dirigimos.

El río Adour.

Tras cruzar el puente llegamos a una pequeña placita, place du Réduit, y tras atravesarla damos con otro puente, en este caso sobre el río Nive. La confluencia de los dos ríos, el Nive y Adour se encuentra a unos cien metros de donde nos encontramos. El centro histórico de Bayona está marcado por la unión de estos dos ríos que dividen la localidad en tres barrios distintos: Grand Bayonne, Petit Bayonne y Saint-Esprit. El primero de ellos, donde vamos, es su corazón histórico y también su centro comercial.

El edificio que vemos en la foto actualmente alberga el Ayuntamiento de Bayonne y el teatro. De estilo neoclásico, fue construido en el año 1843. En lo alto predominan 6 enormes estatuas que simbolizan las actividades económicas y artísticas.

Nos metemos en el centro histórico de Bayonne y nos ponemos a callejear. Es una ciudad muy bonita. Me pregunto porque no vengo más a menudo a esta ciudad con lo cerca que queda de Donostia.

Merece la pena dar un paseo y recorrer sus calles cuyos edificios están decorados con una mezcla armónica de arquitectura vasca y francesa en la que destacan las fachadas con coloridos entramados de madera.

Llegamos a la Catedral de Santa María, de estilo gótico radiante, El sitio estuvo ocupado anteriormente por una catedral románica que fue destruida por dos incendios en 1258 y 1310. La construcción de la catedral actual se inició en el siglo XIII y se concluyó a principios del siglo XVII, a excepción de las dos torres que no se terminaron hasta el siglo XIX.

Pórtico principal de la catedral.

La catedral de Bayonne es una de las más bellas del suroeste de Francia y desde 1998 está declarada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad como monumento del Camino de Santiago en Francia. Mide unos 70 metros de altura.

En la catedral entregan la credencial del peregrino y vamos a solicitarla ya que en Donostia el lugar donde la daban estaba cerrado por el COVID19. Entramos y tenemos suerte, damos con un sacerdote muy majo que nos la entrega y nos pone el primer sello. Es un espectaculo ver estas construcciones desde dentro y desde fuera.

El policromado de sus bóvedas y sus vidrieras son puro arte.

Adosado a la catedral se encuentra el claustro, del siglo XIII, uno de los más grandes de Francia. El acceso es gratuito. pero nosotros lo encontramos cerrado. Nos tenemos que conformar con esta imagen desde una de sus puertas de acceso. 

Después de callejar un poco nos dirigimos al río Nive. Sabemos que el Camino de Baztan transcurre durante unos15 Km por su margen izquierda.

Poco a poco vamos dejando atrás el barrio historico siguiendo el paseo fluvial.

Me llama la atención lo estrechas que son algunas casas. 

Enseguida enlazamos con el paseo fluvial junto al río Nive, una especie de carril bici que llega hasta el pueblo de Ustaritz. Antes de pasar bajo el primer viaducto vemos un totem indicando los tres caminos que salen desde Bayonne: el que va a Roncesvalles; el Camino de Baztan; el Camino Vasco del Interior.

El camino, a pesar de la pista de asfalto, es una preciosidad. 

Dejamos atrás definitivamente el barrio histórico y nos despedimos de Bayonne.

Bancos colocados estrategicamente que invitan a pararse y contemplar el río.

Hoy es martes, día laboral, y a estas horas no anda nadie por este paseo fluvial. Estamos muy animados y vamos disfrutando de lo que vemos a cada paso. Hay tanto contraste, respecto a donde nosotros vivimos, que todo nos llama la atención.

A mi me fascinan las casitas que tienen. Por aquí no se ven barrios con grandes edificios y rascacielos, no se construye verticalmente sino horizontalmente. Casi todo son casitas unifamiliares que parecen sacadas de un cuento. 

Las casas junto al río son increibles, parecen palacetes

Todo son detalles cuidados, hasta en enrejado de las entradas de las casas.

Muchas de las casas junto al río Nive tienen su pasarela flotante.

Colores otoñales

El único bar que podemos encontrar en el paseo fluvial es el bar restaurante L'Heverge de la Nive que se encuentra en el Centre Équestre Niv'au Galop Club. Si se encuentra abierto puede ser un buen lugar donde realizar una pausa. Hasta Ustaritz no hay otro.

Una cosa que nos ha llamado la atención es que los caballos que hemos visto en los pastizales llevan una especie de abrigo. Nunca lo habia visto.

El camino es una gozada.

El río Nive desde el puente de Portuberri. Si se cruza se llega al pueblo de Villefranque.

El caserío Portuberri

Este edificio se llama Notre Dame de la Nive. Creía que iba a ser una ermita pero solo es un maison más.

Un indicador anunciando un albergue en Ustaritz.

Por esta zona empiezan a abundar los campos con plantaciones del famoso Piment d'Espelette.

Entrando en el pueblo de Ustaritz.

Abartachipia. Otra impresionante maison con una fachada preciosa cubierta de hiedra.

La église de Saint Vincent (Ustaritz).

Château Lota, declarado monumento historico desde 2013. Impresionate mansión neorrenacentista. El castillo de Lota fue construido entre 1874 y 1879. Los patrocinadores fueron Bernard dit Baptiste Duhart y su esposa Dominique-Rosalie Ainciondo. Construyeron esta magnífica mansión en su pueblo natal de Ustaritz después de hacer una fortuna en Chile.

Es la hora de almorzar y que mejor lugar que hacerlo en los jardines que hay junto al Château Lota. El amigo Eneko ha preparado una tortilla de patatas con cayenas que quita el hipo. A vuestra salud.

Antiguo ayuntamiento de Ustaritz.

Casas típicas en Ustaritz.

Lavadero.

Saliendo del casco urbano pasamos junto al cementerio donde podemos ver la primera iglesia de UStaritz y las tumbas alrededor.

Vamos alternando tramos de carretera con pistas de tierra mientras cruzamos una barrio de Ustaritz con varias casas diseminadas.

Cuando nos metemos por caminos de monte los encontramos bastante encharcados. 

Un precioso rincón donde en el mapa del IGN francés aparece como Gué Plle por donde pasa Halzabaltzako erreka.

Pasada la erreka atravesamos unas colinas preciosas.

Colinas herbosas donde multitud de vacas disfrutan de sus pastos.

De camino a Soräide. Cada dos por tres nos tenemos que poner la capa. Está muy nublado.

Entre chaparrón y chaparrón tenemos algúnos claros que me permiten seguir tomando fotos. A lo lejos vamos divisando Soräide.

Frente a nosotros dos montes muy conocidos del macizo de Modarrain.

Nos vamos acercando a Soräide. Las casas que vemos son de alguno de sus barrios. En el mapa aparece como Etxetoa. Luego andaremos por esa parte alta que vemos sobre las casas, de camino al Col de Pinodieta.

Seguimos viendo plantaciones del pimiento rojo de Espelette.

De camino al Col de Pinodieta.

Tras afrontar un buen repecho desde Soräide salimos a la carretera D-20 que une Espelette con Ainhoa, justo en el Col de Pinodieta.

En suave ascenso nos dirigimos hacia la cima de Errebi aunque no llegaremos a ella.

Precioso paisaje donde podemos contemplar una la paleta completa del color verde.

Por fin vemos el pueblo de Ainhoa, donde ahora mismo llueve. Ya tenemos ganas de llegar.

Después de una buena bajada por camino de monte y algo de pista al final, entramos en Ainhoa por donde hay un oratorio dedicado a Saint Joseph.

Enseguida llegamos al centro neurálgico de Ainhoa donde se encuentra la iglesia de Ntra Sra de la Asunción, el cementerio y su frontón.

La calle principal de Ainhoa. Dicen que es un de los pueblos más bellos de Francia. En el siglo XIII se fundó la ciudad como vicaría del monasterio navarro de Urdax. Desde entonces sirvió para dar servicios a los peregrinos del Camino de Santiago. Sus casas se construyeron pegadas unas a otras a lo largo de una sola calle, por lo que su forma es la típica de una bastida fortificada.

El frontón.

Y el único bar que vimos abierto, el Ezkurra. Por cierto, las cañas al mismo precio que en Donostia y eso que Francia siempre ha sido caro en el tema del alcohol. Como nos toman el pelo en Donostia en los bares.

Lo primero es buscar el albergue, acomodarnos, descansar un poco y luego ya saldremos a dar una vuelta. Preguntando conseguimos llegar al albergue Harazpy

Son 18€ por persona. El albergue para nosotros solos. Tiene cocina completa. Más no se puede pedir por ese precio.

Hoy vamos a pillar a gusto la litera. No hay calefación pero tenemos varias mantas.

Después de echar una pequeña siesta salimos a dar un paseo y tomar algo.

Visitamos la iglesia y el cementerio, repleto de estelas discoidales.

Casi todas las casas que vemos en la calle principal fueron construidas entre los siglos XVI y XVIII ya que el pueblo fue arrasado anteriormente durante la Guerra de los Treinta Años.

Y después de un par de cañas enel Ezkurra regresamos al albergue. Hoy cenaremos unas albondigas en la estupenda cocina del albergue gracias a que Eneko las había cocinado hace unos días.