Visitas totales:

lunes, 29 de octubre de 2012

Artikutza: Tierra de agua, bosques y ferrerias


Artikutza: Tierra de agua, bosques y ferrerías

Domingo, 28 de octubre de 2012

Un año más volvemos a la finca de Artikutza, ese rincón mágico del norte de Navarra donde el agua nunca calla y los bosques parecen salidos de un cuento. En esta ocasión me acompañan Óscar y Beltri, compañeros habituales de andanzas, con los que planeo recorrer algunos de sus rincones más emblemáticos y visitar las antiguas ferrerías de Artikutza, Goizarin, Elama y Urdallue.

De la primera ferrería, la de Artikutza, no tenía muy claro dónde se encontraba, pero rebuscando por internet di con un documento que aclaraba el misterio: mencionaba los edificios de Olaetxea, Olajaundegi, Ostatu Zarra, Bekoetxe, Almandoz y Ferronea u Olazar, todos ellos relacionados con la ferrería original. Así que, viendo que “Ola” en euskera significa fundición o ferrería, todo encaja: la ferrería de Artikutza estaba justo donde hoy está el poblado.

Parece que hubo más ferrerías por la zona —Egazki, Maizolope y Erroiarri— aunque no las tengo localizadas. Alguna incluso conservaba su canal. Y antes de seguir, una mención especial a Larra, por su estupendo mapa de senderos de Artikutza, que me ha servido de guía para montar este recorrido tan completo: bosques, cordales y un sinfín de historia ferrona.

 
El recorrido

Comenzamos en Eskax, bajando hacia el poblado de Artikutza por el antiguo trazado del ferrocarril minero. El camino ya promete desde el principio, con un bonito balcón natural sobre el barranco de Erroiarri, desde donde se tienen vistas preciosas de los montes que rodean la finca.

Llegamos al poblado y, cómo no, hacemos la primera parada técnica para tomar un café en el Ostatu Zahar, el alma del lugar. Tras el cafecito, seguimos paralelos al río Artikutza, pasando junto a los viejos edificios de Ola Zubieta hasta la confluencia con el río Elama.

Allí empieza nuestra subida por el valle de Elama, donde cruzamos un antiguo puente de piedra para llegar a la segunda ferrería del día: Goizarin. La pista que seguimos era también parte del recorrido del tren minero, y aún se respira ese aire industrial escondido bajo los castaños y las hayas.

Más adelante alcanzamos Labeeta, punto donde salía el ferrocarril hacia la Estación del Norte de Errenteria. Aún se conservan restos de uno de los hornos de calcinación; el otro lo desmontaron para construir un puente con sus piedras. Unos metros más allá, entre la maleza, aparecen las ruinas de la ferrería de Elama, un enclave enorme que tuvo que ser muy importante en su época.

Desde allí retrocedemos un tramo hasta encontrar un camino que sube por la ladera sur del Beltzuntze. En la subida, casi por casualidad, topamos con lo que parece un nevero y una sima (anotados los waypoints, por si acaso). Seguimos ganando altura, a veces campo a través, hasta enlazar con la pista Goiko Akuko Bidea.

Un pequeño desvío nos lleva hasta la piedra de sel de Aku Bekoa, y luego regresamos a la pista para dirigirnos hacia el collado de Otaran. Un poco antes de llegar, nos metemos a la derecha en un hayedo espectacular, el de Urdallue: 1,7 kilómetros de pura delicia bajo las hayas.

Cruzamos la erreka de Urdallue por un viejo puente de madera y enseguida damos con las ruinas de la última ferrería del día, la de Urdallue, que cierra el círculo de nuestra ruta ferrona.

Desde allí, seguimos hacia el antiguo depósito de Lizarurdiñeta, pasando por los parajes de Arranokabieta y Lapurzulo. Paramos a comer algo en el depósito y, con las pilas recargadas, toca subir a la cima del monte Izu (828 m).

Después seguimos el cordal hasta el collado de Burnaiztieta, pasando por las cimas de Pagolleta, Almendruitz y Bidango Gaina. Las vistas desde aquí arriba son una gozada, con el mar de bosques de Artikutza extendiéndose hasta donde alcanza la vista.

Para terminar, bajamos hacia Eskax por el PR, atravesando los parajes de Naparbide, Gatzarrieta y Larreaundi.

En total, casi 30 km de puro disfrute, entre historia, naturaleza y el inconfundible sonido del agua que nunca falta en Artikutza. Una jornada redonda.


Photobucket

Perfil de altura:
Photobucket

Track para GPS (Pinchar sobre el icono verde para acceder al track)


Llegamos a  Eskax y hace un frío que pela, la temperatura rondará los 2ºC. Las cimas a esta altura están nevadas y me alegro de haber metido en la mochila guantes y gorro.
Photobucket

Los primeros metros transcurren por carretera hasta dar con el PR, el antiguo trazado del ferrocarril minero-forestal, que baja a Artikutza
Photobucket

En el momento que se abandona la carretera surge ante nosotros Artikutza, sus senderos, su bosque espeso
Photobucket

Seguimos el antiguo trazado del ferrocarril minero
Photobucket

Vistas desde el balcón natural sobre el barranco de Erroiarri
Photobucket

Photobucket

Seguimos descendiendo hacia el poblado cómodamente
Photobucket

y se pone a nevar por estas cotas.
Photobucket

Llegamos al poblado de Artikutza
Photobucket

El ostatu Zahar visto por la parte de atrás
Photobucket

Olajaundi, la que fue la casa del ferrón
Photobucket

A la entrada de Olajaundi hay unos mojones. Uno de ellos tiene grabado el báculo-cruz, símbolo de la Colegiata de Roncesvalles, antiguos dueños de la finca
Photobucket

El Ostatu Zahar. Cuenta con unas cuantas mesas para poder almorzar, comer, etc. Tiene baños y dispone de una máquina que sirve café, chocolate, etc
Photobucket

La erreka Artikutza a su paso por el poblado
Photobucket

Una báscula, ahora de adorno, pero en su día sirvió para las transacciones comerciales: madera, carbón, hierro, etc
Photobucket

Aprendiendo a crear GIF animados
Photobucket

Saliendo del poblado pasamos por los abandonados edificios de Ola Zubieta que sirvieron de alojamiento a los trabajadores que construyeron el embalse de Enobieta
Photobucket

Entramos en el valle de Elama
Photobucket

La erreka Elama viene bien cargada de agua con todo lo que ha llovido en estos días
Photobucket

Las ruinas de la ferrería Goizarín.
Photobucket

El viejo puente de dos ojos por el que se accede a Goizarín
Photobucket

Photobucket

La vieja fragua en la que antaño tuvo días que no paraba
Photobucket

En los alrededores de la fragua pueden verse todavía las escorias que tienen un alto porcentaje de hierro
Photobucket

Photobucket

Más adelante, mientras nos dirigimos al horno de Labeeta, un trozo de rail sobresale en la pista
Photobucket

Nunca había visto esta erreka con tanta agua
Photobucket

Photobucket

Llegamos a Labeeta. El viejo horno de calcinación cilíndrico se conserva muy bien. Antaño hubo dos hornos pero lo derruyeron. Comentan que la piedra se uso para la construccion de un puente aunque también hay quien cuenta que se uso para pavimentar una carretera. Quizás las dos cosas.
Photobucket

El horno de Labeeta
Photobucket

Photobucket

Desde el horno retrocedemos un poco y tomamos un desvío a la izquierda dirección Elama
Photobucket

Enseguida se llega. Las ruinas se hacen visibles.
Photobucket

Aquí hubo varias construcciones
Photobucket

Este parece ser uno de los edificios principales por los muros tan altos y el tamaño
Photobucket
cruzando el puente aparecen más restos
Photobucket

la vieja fragua y un par de caseríos estaban en esta parte del río. Elama, sin duda, fue un asentamiento importante
Photobucket

Photobucket

Volvemos sobre nuestros pasos y comenzamos a subir por la ladera sur del monte Beltzuntze. Al principio el camino que seguimos es claro pero perdemos la traza de subida así que tenemos que tirar de GPS. Sin quererlo damos con lo que creemos es un nevero.
Photobucket

¡Vaya!, una amanita.  Esos cachos que faltan...¿algún animalillo?
Photobucket

Siguiendo el track del GPS no hay problema para dar con la traza del camino. Al ser un bosque limpio no hay problema para ascender. Esta parte de bosque es muy bonita.
Photobucket

Comienza a llover y tenemos que sacar el paraguas. Ahora hemos dado con un camino al que parece han metido mano y la traza está más que clara. Siguiendo este sendero daremos con el Goiko Akuko Bidea
Photobucket

El agua desciende por todas partes
Photobucket

Aquí el Beltri intentando no mojarse los pies
Photobucket

¡¡Madre mia, ¿esto que es?!!
Photobucket

Salimos a la pista y vamos a ver la piedra del sel de Aku Bekoa
Photobucket

Muy cerca, en la base de este haya vemos un montón de setas
Photobucket

Photobucket

Photobucket

Photobucket

Photobucket

Continuamos por esta parte alta antes de salir de nuevo a la pista. Una gozada esta zona también
Photobucket

Y ya estamos metidos de lleno en el hayedo de Urdallue. ¡Qué maravilla!
Photobucket

Photobucket

El árbol de los horrores
Photobucket

Beltri no pierde detalle
Photobucket

Esto imagino que será el comienzo de los hongos yesqueros
Photobucket

Setitas en el tronco del haya
Photobucket

Photobucket

Es increíble, esta todo cubierto de musgo
Photobucket

Photobucket

Esto tiene pinta de ser hongos
Photobucket

y de después de gozarla bajando por este hayedo damos con el puente que cruza la erreka Urdallue
Photobucket

Las ruinas de la última ferrería aparecen ante nosotros: Urdallue
Photobucket

Photobucket

Subiendo hacia el deposito de Lizarurdiñeta este pedazo de tronco caído llama la atención
Photobucket

Por la parte alta y antes de llegar al deposito el viejo aparece el canal de Erretena
Photobucket

El camino transcurre junto al pequeño canal hasta el deposito
Photobucket

Vista del valle de Urdallue
Photobucket

Llegada al deposito de Lizarurdiñeta donde haremos una pausa y comeremos algo
Photobucket

Después de comer damos con la pista que sube de Artikutza a Izu y todo para arriba. Tenemos derca de 300 metros de desnivel hasta Izu
Photobucket

A medida que alcanzamos cotas más altas empieza a aparecer la nieve
Photobucket

saliendo del bosque y entrando en zona de pastos
Photobucket

Ahí arriba, el Izu
Photobucket

Photobucket

Mirada atrás
Photobucket

Últimos metros
Photobucket

Los montes navarros están muy nevados. La estampa es muy invernal.
Photobucket

Llegamos a la cima del Izu (828m)
Photobucket

Las vistas: impresionantes. Al fondo el majestuso Larun
Photobucket

El pueblo de Arantza
Photobucket

Buzón del Izu
Photobucket

El cordal que vamos a seguir
Photobucket

Este cordal es un lujo. Las vistas que se tienen son de 10
Photobucket

Photobucket

El embalse de Enobieta y los bosques de Artikutza vistos desde arriba
Photobucket

Cima del Pagolleta. donde se encuentra otro mojón con el símbolo de la Colegiata de Roncesvalles (báculo-cruz)
Photobucket

El mojón tiene unas inscripciones
Photobucket

Otro mojón en el collado de Enubieta antes de subir al Almendruritz
Photobucket

Otra amanita. Esta ya está más vieja
Photobucket

La pottokilla camuflada con los helechos
Photobucket

Cima de Almendruritz donde alguien ha colocado algún monumento funerario. Las imas de algunos montes están empezando a parecer cementerios
Photobucket

Aiako Harria, referencia inconfundible
Photobucket

Otra pottoka y al fondo los montes Mendaur y Mendieder
Photobucket

En Bidango Gaina bajando hacia el collado de Burnaiztieta. Al fondo del cordal, donde empiezan a aparecer las rocas, el Galtzarrieta
Photobucket

El menhir de Bidango Gaina
Photobucket

Collado de Burnaiztieta donde está la borda de cazadores "Gaztin Borda"
Photobucket

Hacia Eskax por el PR, siguiendo las marcas blanquiamarillas
Photobucket

Hayas trasmochas antes de llegar a Eskax
Photobucket

Muchas raíces por este sendero
Photobucket

Llegada a la casa del guarda "Eskax"
Photobucket